Nos llegó por ahí esta vaina de Alberto Monteagudo. Seguro estamos que no se arrechará por haberlo publicado acá.
¿CULTURA DEL ESPECTÁCULO O CULTURA REVOLUCIONARIA?
La República Bolivariana , propuesta y liderada desde 1999 por el Comandante Presidente Hugo Chávez Frías, consagra el Poder Constituyente Originario , es decir el poder protagónico del pueblo.
El proceso al que da comienzo, sustentado en la doctrina Bolivariana-Robinsoniana-
De ahí su originalidad; de ahí su fuerza y eficacia. De ahí su trascendencia mas allá de fronteras .
Su potencialidad como chispa capaz de producir el incendio purificador que el País (y el Mundo) necesita, estará en razón directa con nuestra capacidad de asumir y trascender el accidente histórico que llamamos Proceso Bolivariano y transformarlo en cultura, en cultura revolucionaria.
Para comenzar ,bastaría con hacer buena la letra de la Constitución Bolivariana entre otros los Arts. 326 y 327. en donde están los lineamientos doctrinarios para la creación y de una cultura del ejercicio de soberanía y seguridad de la nación, patrimonio humano - etnias ,Poder Popular, riquezas tangibles e intangibles, recursos energéticos, hìdricos, espacio sideral (Satélite S.B.,) no uso de transgènicos y fertilizantes dañinos etc.; una cultura de la unidad continental que utilice todos los medios de difusión del Estado para la siembra y consolidación de una conciencia de hermandad y solidaridad de los pueblos en contra del capitalismo imperial.
Para ello se hace imperativo superar el paradigma impuesto por las élites - y que seguimos copiando servilmente - que la reduce a las prácticas artísticas (“las Bellas Artes) o el espectáculo , desconociendo las infinitas dimensiones del saber humano.
Convivir, compartir, respetar , crear , disfrutar, preservar, aprender, enseñar, , amar , apreciar, perdonar, honrar, cuidar, construir, observar, deducir, sentir. percibir, pensar, investigar , comunicar ,son habilidades innatas que se condensan, amplían y transmiten conformando “lo cultural”.
En estricta lógica, mientras sigamos refiriéndonos a un tal “sector cultura” estaremos al mismo tiempo aceptando (y consagrando) ,una categoría burocrática concebida en la cuarta república para el reparto clientelar del erario público que supone la existencia de una mayoría “inculta” que al parecer no crea ,no percibe, no construye , no tiene nada que enseñar, no investiga ,no comunica. Es recipiente inerte y pasivo de todo lo que “se le baja” desde las alturas por cuenta de viejas o "nuevas nuevitas" élites esclarecidas.
Si la Revolución Bolivariana Socialista ha de prevalecer ante el insidioso avance contrarrevolucionario y neo –decadente ,se impone la urgente e inaplazable aplicación de la R de la rectificación en cuanto a las políticas de Estado sobre “lo cultural” .
Para comenzar debe desmontarse definitivamente el andamiaje burocrático piramidal heredado (y en algunos casos hasta repotenciado) que al impedir que se expresen plenamente “los poderes creadores del Pueblo”, propicia la entronización de viejas y nuevas élites conciliadoras donde el enemigo histórico encuentra un nicho ideal para su labor de debilitamiento de la conciencia revolucionaria. Ejemplos : La destrucción de la memoria en el Cuartel San Carlos. La cesión de los espacios museísticos para la Exxon , Coca Cola, Pepsicola,Pirelli, Grupo Polar.
Más de media docena de proyectos de Ley Orgánica de Cultura ; unos con nombre propio como el de Milagros Santana , el Espinosa –Meier , el híbrido del Ministro Sesto y el presentado por Ninoska Lazo ,elaborado por un colectivo de ciudadanos comprometidos con la Revolución Bolivariana , junto a otros otros de autoría anónima y preñados de malas intenciones , han circulado por los predios de la Asamblea en estos intensos diez últimos años.
El que a estas alturas aún no contemos con una Ley tan estratégica, da la medida de las fuerzas e intereses en juego, tanto como de la falta de claridad política que ha relegado tan crucial asunto a un limbo sin horizonte a la vista.
Quienes hemos permanecido en atenta vigilia desde su aprobación en primera discusión (por unanimidad y aplausos en tiempos de la Asamblea de la cohabitación contra natura) y después ,impidiendo su aprobación en segunda discusión, aún no llegamos a un diagnóstico sobre donde termina el descuido y la ignorancia, y empieza la complicidad en esta tierra de nadie en donde se han expresado sin restricción alguna los bufetes de la “Industria Cultural Corporativa” criolla y transnacional, mientras que a los que solo pretendemos ejercer nuestro derecho constitucional a ejercer la contraloría social, desde los altos predios de la “Kultura” constituída, se nos trata como incómodos aguafiestas, cuando no de contrarrevolucionarios, tontos útiles de la Cia.
En el permeable “sector cultura” estatal, la penetración del enemigo contrarrevolucionario ( algunos ,públicamente antichavistas) es cada vez mas notoria. Las distintas “plataformas” los han ido incorporando hasta formar un cada vez mas eficaz dique de contención frente a la militancia comprometida con el proceso ,obligando a muchos camaradas a “exilarse” en otros ámbitos públicos o a arreglárselas “por la suya” mientras , robinsonianamente, "inventan" otras trincheras de lucha revolucionaria.
Dada la importancia estratégica de la producción audiovisual, una de las urgentes tareas de la Revisión para la Rectificación y el Reimpulso, consiste en una auditoría ( tanto económica como ideológica) a toda la plataforma cinematográfica, con atención especial a la “La Villa del Cine” antes de que las evidencias , como en el caso del Conac ,pasen a archivos muertos.
Lo que allí se encuentre no debería sorprendernos dado el paradigma que la impregna. Recordemos que toda su estructura gira sobe la que en su momento se proclamó (noticiero VTV) como “El Hollywood de Guarenas”. Algo que gracias a la entreguista Ley de Cine ha enriquecido y "empoderado" aún mas al intocado oligopolio de laboratorios- distribución - exhibición que alimenta sus pantallas con mas del 95 % de películas made in Usa.
Los vacíos de la Ley Resorte ( una importantisima ley cultural ), señalados en su momento cuando intentamos infructuosamente modificar su redacción, ha producido ( como lo anticiparamos ) una grotesca distorsión en donde los testaferros de los canales comerciales terminaron ocupando el lugar reservado a los productores independientes con una visión anticapitalista de los contenidos.
¿O es que allí se ha emitido alguno de los excelentes y eficaces documentales de Angel Palacios?
Por cierto ¿Nunca se han preguntado porqué la Ley Resorte se circunscribe a Cine Radio y Televisión, dejando afuera los medios impresos.? ¿otra vez un tiro en el pié?
Nos consta que existe talento para una producción independiente de contenidos periodísticos . ¿O vamos a seguir sin responder a los pseudos reportajes a toda página sobre cuanto tema frívolo inventa la Industria Cultural Corporativa? ¿Acaso no está mas que probado que Venezuela cuenta también con una capacidad mas que suficiente para contrapesar , por ejemplo, el monopolio de historietas norteamericanas (y de material gráfico en general ) al servicio del colonialismo cultural?
Hoy por ejempo ,estaríamos publicando en la propia prensa golpista (y sin avisos pagados a agencias idem ) campañas a favor del ahorro energético con material de producción gráfica independiente ; para ello contamos con excelentes comunicadores gráficos bolivarianos.
En ciencia y tecnología, aspecto cultural de importancia estratégica ocurre lo mismo. Y ni hablar de las artes plásticas sometidas a Megaexposiciones , un megaconejo distractor salido de la galera del ministro mago que las definió como "una suerte de Marathón"(sic) . La desmovilización parece ser la regla.
Una Ley Orgánica de Cultura que no contemple estos aspectos con una contundencia capaz de contrapesar una legislación inconexa a la cual el avance del proceso revolucionario ha mostrado sus “ fallas de borde” , no es lo que necesitamos sino todo lo contrario.
Hermano presidente , llame sin demora a la conformación de una Constituyente Cultural con la participación protagónica y horizontal de todos aquellos que desde distintos ámbitos de los Poderes Creadores del Pueblo estamos en condiciones de aportar para que esta Revolución cuente con una ley capaz de enfrentar el peligroso horizonte de amenazas internas y externas que se ciernen sobre ella.
Alberto Monteagudo
combatiente cultural
Caracas 25 de Febrero de 2010
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